Sucre, un reservorio de oportunidades

El Estado Sucre es un verdadero reservorio de oportunidades. Su extensión de 11.800km² es casi virgen y de majestuosos paisajes. Una larga franja de fértiles tierras coronadas por majestuosas montañas se vuelca sobre el Mar Caribe a través de 705 Km. de costas. Al este se encuentra la Península de Paria con el lago de asfalto natural más grande del planeta y playas exóticas, bosques tropicales, ríos abundantes y aguas termales y por el oeste la Península de Araya, que en contraste con la anterior, es atractivamente árida, con playas cristalinas con tonalidades que van de azules a verdes que se combinan con el vaivén de las olas y una inmensa laguna que produce sal a cántaros, sobre el Golfo de Cariaco, el cual representa un gran vivero natural. Ambas penínsulas se presentan como dos brazos abiertos al mundo, queriendo abrazar a la humanidad entera.

En el estado se hallan más de 100 playas con características distintas una de las otras, también cuenta con muchos ríos los cuales sirven para el consumo de agua potable de sus habitantes, para el riego de los diferentes cultivos y para proporcionarle el vital líquido a los estados vecinos.

Sucre dispone de 4 Parques Nacionales creados para preservar el patrimonio paisajístico, geológico, flora, fauna, montañas, ríos, aguas termales, de manantial y fondos marinos impresionantes de nuestra región. A través de ellos los visitantes pueden entrar en contacto profundo con la vida silvestre; apreciando espectaculares bellezas naturales.

Asimismo, en la región se encuentran 3 puertos marítimos, 3 aeropuertos, 2.106 km de vías de comunicación, infraestructura hotelera y una red de posadas y restaurantes diseminados por todo el territorio.

De igual manera, Sucre dispone de una excepcional posición geográfica, con costas en el océano Atlántico y el mar Caribe, condición que ha permitido desarrollar en otrora la flota pesquera más importante de Venezuela. También destacan las fértiles tierras que han producido alimentos de calidad, como el cacao pariano, del cual se produce uno de los mejores chocolates del mundo.

El clima de Sucre es tropical, con una temporada de lluvias que va de julio a diciembre y una temporada seca de enero a junio, caracterizándose por la presencia de los vientos alisios. Las temperaturas oscilan entre los 26ºC y 34ºC observándose cotas hasta de 15ºC en las zonas montañosas como en el macizo del Turimiquire y sus estribaciones.

Los habitantes de la región, su patrimonio más importante, somos gente buena, trabajadora, amable y cálida, como el clima tropical de esta tierra de gracia, colmada de historia, tradición y folclore.

Sucre es cuna de grandes héroes como el Mariscal de América Antonio José de Sucre, el que con su inteligencia y su espada ayudó a dar punto final a 300 años de coloniaje en América del sur.